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Eliminación de tatuajes

Existen circunstancias que nos impulsan a desear eliminar un tatuaje de nuestra piel, ya sea por razones laborales, porque el diseño ya no está de moda, o simplemente porque hemos dejado de apreciarlo. También puede haber casos en los que el tatuaje presente errores o fallos. 



En Clínica Quiroga, el primer paso es recopilar la historia clínica del paciente para evaluar de manera objetiva la presencia de ese tatuaje en su piel.

Cuidamos de tu piel

Somos plenamente conscientes de la sensibilidad de la piel, incluso en el proceso de eliminación de un tatuaje, por lo que actuamos con sumo cuidado. Empleamos diversas longitudes de onda láser dirigidas a diferentes colores de tinta. Estas intensas pulsaciones de luz se encargan de descomponer las partículas de tinta del tatuaje, permitiendo que la piel recupere su aspecto natural.



En Clínica Quiroga, abordamos la eliminación de tatuajes desde una perspectiva médica, priorizando el cuidado de la piel. Nuestro enfoque se centra en evitar cicatrices y llevar a cabo el tratamiento en las sesiones apropiadas, utilizando todos los instrumentos de forma estéril. Nuestro equipo médico altamente calificado realiza este procedimiento con cuidado meticuloso, asegurando una técnica mínimamente invasiva.

Dudas frecuentes

Nuestro láser Q-Switched es el láser más avanzado en la actualidad para realizar este tratamiento. Trabaja mediante energías muy altas y pulsos muy cortos del orden de nanosegundos (Ns), lo cual genera un efecto fotoacústico capaz de fragmentar las partículas de tinta, facilitando su posterior eliminación a través del sistema linfático y de la piel (eliminación transepidérmica). Nos permite obtener los mejores resultados, con una menor incidencia de efectos adversos sobre la piel y una reducción en el número de sesiones.

La cantidad de sesiones necesarias para la eliminación de un tatuaje es variable y difícil de predecir, ya que intervienen diversos factores. Estos incluyen la composición del pigmento utilizado, el color y la calidad de la tinta, el grosor de la capa de tinta en el tatuaje, su tamaño, su ubicación y la capacidad de regeneración de la piel ante el impacto del láser. Por lo general, la eliminación de un tatuaje realizado por un profesional suele requerir entre 5 y 15 sesiones.

Es variable y es difícil de adivinar ya que son muchos los factores que intervienen como: la composición del pigmento empleado, el color de la tinta, la calidad de esta, el grosor de la capa de tinta alojada en el tatuaje, el tamaño, la localización de este y no menos decisiva resulta ser la mayor o menor capacidad de regeneración de la piel frente al impacto del láser.
Un tatuaje realizado por un profesional suele llevar entre 5 y 15 sesiones su eliminación.

Es necesario esperar a que la piel se regenere entre sesiones para reducir el riesgo y lograr resultados más exitosos. Como norma general, se suelen dejar alrededor de 8 semanas entre sesiones. Sin embargo, la duración puede ajustarse según las características de cada paciente, como el tipo de piel, la capacidad de regeneración, el tamaño y tipo de tatuaje, entre otros factores. En circunstancias especiales, como en el caso de opositores que requieren mayor celeridad, se evalúa la situación y se toman decisiones conjuntas entre el especialista y el paciente.

Resultados

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logotipo Harmony XL PRO

Con cabezal 532

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